Sin duda, uno de los primeros aspectos que notamos al acercarnos a una persona es su sonrisa y por consecuencia, sus dientes. Además, de la forma, el tamaño y su posición, existe un aspecto estético que preocupa a mucho: el color.
Por esta razón, muchos de nuestros pacientes visitan la clínica con el objetivo de realizarse un tratamiento de blanqueamiento dental.
¡Y no están equivocados! Este es un procedimiento que ofrece resultados increíbles. Según la revista Quality of Life Research, las personas que se someten a un blanqueamiento dental, en tan sólo 3 meses notan el impacto positivo sobre su propia percepción estética, lo cual, mejora enormemente su salud psicológica.
A continuación, te diré en qué consiste un blanqueamiento dental y los procedimientos que se deben seguir para realizarlo:
¿Cómo saber qué blanqueamiento dental es para mí?
Además del blanqueamiento externo tradicional, en la actualidad podemos someternos a un blanqueamiento interno.
Debido a lo anterior, antes de seleccionar uno es importante conocer sus principales características. Aunque es trabajo del especialista ayudar al paciente a elegir el método más adecuado, no está demás que conozca en qué consisten:
Blanqueamiento interno vs externo: principales diferencias
En líneas generales, podemos detectar 2 diferencias concretas entre los métodos de blanqueamiento dental:
Vitalidad del diente
Entre las principales discrepancias de estas terapias podemos encontrar que el blanqueamiento interno se realiza en los dientes no vitales, mientras que el externo se usa para tratar los dientes vitales.
Esto quiere decir que si realizamos un blanqueamiento externo a un diente no vital no lograríamos que este aclarará su tono, ya que las variables que se encargan de la decoloración tienen lugar en la cámara pulpar.
Esto significa que todo el procedimiento para aclarar el esmalte debe hacerse en el interior (estructuras internas) del diente.
Cantidad de piezas dentales
Otra divergencia entre los métodos descritos anteriormente es que el blanqueamiento externo se lleva a cabo en todos los dientes (excepto en los molares que no están a la vista). Por otro lado, el procedimiento interno es realizado de forma concreta (localizada) en las piezas dentales que sufren de manchas generadas en la cámara pulpar.
Ahora bien, a pesar de sus diferencias, los métodos son compatibles y, de hecho, muchos pacientes deciden combinarlos para lograr aclarar más tonos de manera uniforme.
¿En qué consiste el blanqueamiento dental interno?
Ahora que ya conocemos en qué consiste cada blanqueamiento dental (interno y externo), procederemos a explicar el método interno.
Esta terapia se realiza en aquellas piezas dentales que ha pasado por una endodoncia (no vitales). Al aplicar esta técnica se logrará que el diente adquiera un aspecto más blanquezco y recupere el color que ha perdido. En términos generales, el procedimiento consistirá en colocar un agente blanqueador en las estructuras internas del diente.
La aplicación se puede hacer en cualquier diente no vital, aunque siempre se realizará en el sector anterior, ya que es el que mayor visibilidad tiene. En esta zona, hallaremos los incisivos y los colmillos.
Al utilizar esta técnica lograremos blanquear un sólo diente sin ser muy invasivos ni causar molestias al paciente.
Los dientes pueden adquirir una tonalidad oscura después de una endodoncia o un traumatismo.
¿Cómo surge la coloración amarilla en los dientes?
El cambio de color de una pieza dental se puede deber a la desvitalización del diente producto de una endodoncia. Esto se genera debido a que, durante el procedimiento, se “mata al nervio” y el diente sufre una alteración en su tono.
Otra razón de la decoloración puede ser un error al realizar la endodoncia (o que se realice de manera incompleta) o el uso de elementos de alta tinción.
Al mismo tiempo, un traumatismo en el diente puede generar que se torne de color amarillo, ya que puede necrosarse debido al impacto. También es posible que el nervio de la pieza dental entre en el estado de calcificación, lo que provocará que adquiera una tonalidad amarillezca con el paso del tiempo.
¿Hay algún tratamiento que elimine el tono amarillento de los dientes?
Aunque los dientes con tonalidad amarilla son muy relevantes para los pacientes, nosotros te recomendamos que no te obsesiones con tenerlos blancos.
En muchos casos, la decoloración se genera por un traumatismo que pudo darse en la adolescencia o la juventud. Por lo general, se pueden tratar de muchas maneras a través de soluciones modernas que se adaptan a cualquier necesidad.
Esto incluye tratamientos diseñados para blanquear una sola pieza dental que presenta un tono más oscuro.
Para descubrir el mejor tratamiento para ti, te recomendamos ponerte en contacto con un experto del blanqueamiento dental en Madrid. Nuestros dentistas estarán encantados de darte más detalles sobre tu tratamiento.
¿Cómo se blanquea un diente?: Paso a paso
Como hemos dicho a lo largo de este artículo, es esencial que el diente al que se le quiera realizar un blanqueamiento interno haya pasado por un tratamiento de endodoncia. Aunado a lo anterior, es imperativo que el procedimiento endodóntico se haya hecho siguiendo los lineamientos básicos y sin fallos para que no comprometa los resultados del tratamiento para blanquear el diente. Con todo lo anterior listo, los pasos que se deberán seguir serán:
Estudio y diagnóstico
Al visitar nuestra clínica el grupo de profesionales encargado de tu caso analizará tus dientes para determinar el origen de tu decoloración y evaluar el estado en el que se encuentra tu pieza dental. En esta fase, es probable que requiramos tomarte fotográficas y radiografías.
Registro del tono de color
Posteriormente se realizará un registro del tono de tus dientes basándonos en una guía especializada.
Apertura y limpieza de la cavidad pulpar
Con toda la información anterior lista, procederemos a abrir la zona pulpar donde se realizó el trabajo de endodoncia. En esta fase, también nos encargaremos de eliminar los residuos de tejido necrótico o cualquier material de tinción que pueda afectar al tono del diente.
Uso del gel blanqueador
Cuando todos los residuos se hayan eliminado, colocaremos gel blanqueador dentro de la cámara pulpar.
Sellado
Finalizaremos la primera cita sellando la abertura que hicimos al inicio para que el producto blanqueador trabaje y haga efecto sobre el diente.
Revisión
Pasada una semana, deberás acudir a la clínica donde retiraremos el sellador y el gel blanqueador. Aquí nuestros expertos se encargarán de verificar el tono de color y con base en su análisis determinarán si se debe realizar otra aplicación, lo cual, hará que se repita el proceso anterior.
Por otro lado, si los resultados que se obtuvieron son positivos, pasaremos al último paso.
Restauración de la pieza dental
Cuando el diente tenga el tono deseado se procederá a reconstruir el diente.
Aunque la mayoría de los pacientes sólo se someten a una o dos sesiones de tratamiento, es posible que algunos casos requieran de más para alcanzar el tono deseado.
¿Diente amarillo?
Si has descubierto que tienes un diente con un tono más amarillo que el del resto no debes estresarte ni obsesionarte con él. Tampoco utilices remedios caseros o productos milagro. Hoy en día, existen muchos tratamientos para blanquearlo fácilmente y de forma segura.
¿En realidad funcionan los remedios caseros que se usan para blanquear los dientes?
Como hemos dicho en otros artículos no hay productos naturales o caseros que puedan blanquear los dientes de forma efectiva y segura. Aunque en la red, muchas personas aseguran tener la fórmula “mágica” para hacerlo, puedes estar seguro de que sólo perderás tu tiempo y dinero al seguir sus indicaciones.
Es muy importante que evitemos este tipo de trampas. Aunque en la farmacia existan un sinfín de productos blanqueadores, lo más recomendable es que no los apliquemos en nuestros dientes, ya que su diseño es estándar y no se acoplará a lo que necesitemos.
Un tratamiento para blanquear los dientes efectivo y seguro debe ser realizado según las necesidades del paciente por un dentista especializado en el ramo. Sobre todo, cuando se trata de un diente afectado por un proceso endodóntico o un traumatismo.
Tampoco es efectivo recurrir a los remedios caseros que, por lo general, no tienen ningún efecto y afectan a la salud bucodental. Los productos más usados en este tipo de tratamientos suelen ser: agua oxigenada, limón, vinagre, carbón activado y el bicarbonato de sodio. Este último, siendo uno de los más peligrosos, ya que es muy abrasivo y puede generar recesión.
Por otro lado, productos como el agua oxigenada provocan hipersensibilidad, quemaduras y retracción de las esencias.
Aunado a lo anterior, el limón disminuye la fortaleza del esmalte debido a su alto nivel de acidez.
Como puedes darte cuenta el uso de remedios caseros o productos mágicos sólo dañará tu sonrisa. Lo ideal es acudir con un profesional; en nuestra clínica puedes hacer una cita rápidamente para que te valoremos y te brindemos los resultados que esperas.
En la actualidad, la odontología cuenta con las herramientas necesarias para aclarar ese diente amarillento que desencaja con tu increíble sonrisa. Así que no lo pienses más, deja de lado los productos caseros y haz una cita con nosotros ahora. ¡No te arrepentirás!