Aunque ambos sean procedimientos quirúrgicos, el curetaje y raspado tienen importantes diferencias. ¡Te las describimos!
Cuando se trata de la salud bucal, no solo es importante mantener una buena higiene, sino obtener atención especializada. Y es que, cada situación dental es única, y los procedimientos disponibles pueden variar según las necesidades individuales.
Por esta razón, es fundamental comprender cuáles son los procedimientos dentales disponibles y cómo pueden afectar nuestra sonrisa. Pues, así como resulta inaceptable desconocer los tratamientos disponibles, tampoco se pueden permitir las confusiones entre procedimientos.
Ahora bien, en este artículo hablaremos sobre dos de los procedimientos más comunes para tratar enfermedades periodontales: el curetaje y el raspado dental, y de esta manera aprender a diferenciarlos.
Diferencias entre curetaje y raspado:
Dos de los tratamientos más comunes para tratar enfermedades periodontales son el curetaje y el raspado dental. Y aunque ambos están diseñados especialmente para mejorar la salud de las encías y los dientes, existen diferencias claves entre ellos.
Lo que significa que confundirlos puede generar problemas médicos muy graves. Por ejemplo, si se realiza un curetaje cuando realmente se necesita un raspado, no se podría resolver correctamente la acumulación de sarro en las bolsas periodontales, además de la placa bacteriana en la superficie de los dientes.
Lo mismo sucede cuando se confunden los raspados con el curetaje. En los casos en que esto sucede, las bolsas periodontales podrían persistir, lo que afectaría la salud a largo plazo, pues no se atacarían las enfermedades periodontales en profundidad.
Pero, ¿cómo diferenciarlos adecuadamente? Te damos algunos tips:
Curetaje Dental:
En lo que se refiere al curetaje dental, es un tratamiento odontológico que se realiza para tratar los problemas de gingivitis y periodontitis.
Consiste en el pulido y el alisado de las raíces y las bolsas periodontales para eliminar los depósitos de sarro, cualquier bacteria y hasta el tejido inflamatorio acumulado por debajo de las encías.
En otras palabras, durante el curetaje, el odontólogo se dedica a limpiar minuciosamente las superficies de las raíces dentales y las encías para promover la salud bucal. Las características que distinguen al curetaje dental de otro tipo de procedimientos son:
- Es un tratamiento contra las enfermedades periodontales en estado avanzado. Específicamente cuando han evolucionado más allá de la superficie dentaria y se han alojado en el interior de las encías.
- Solamente puede ser realizado por un profesional especializado.
- Su objetivo es eliminar las bacterias y el sarro que se encuentran debajo de las encías y también en la raíz del diente.
- Su alcance es mayor que otros procedimientos, ya que la limpieza es más profunda de las raíces de los dientes.
- Implica el raspado y la eliminación de las mismas bacterias y el sarro que se acumula en la superficie de la raíz del diente, pero con una técnica especializada.
- Es un procedimiento más invasivo que el raspado dental.
Raspado Dental:
Se trata de un procedimiento mucho más simple, al momento de retirar la placa bacteriana y el sarro de las superficies dentales, sin tocar la raíz o debajo de las encías.
Durante el raspado dental es muy común utilizar una herramienta llamada cureta para trabajar en la boca del paciente, pues es menos agresiva. En este sentido, algunas de las características que diferencian al raspado dental son:
- Es un procedimiento preventivo y correctivo. Consiste en la eliminación mecánica de la placa bacteriana y el sarro que se acumulan en la superficie de los dientes.
- Puede ser realizado por un higienista dental o un periodoncista.
- Su objetivo es eliminar la placa bacteriana y el cálculo dental (también conocido como sarro) que se ha acumulado en la parte inferior de las encías.
- A diferencia del curetaje, el raspado se enfoca en la superficie de los dientes y por encima de la línea de las encías.
- Se hace uso de instrumentos manuales o eléctricos para poder eliminar las bacterias y los sedimentos que pueden causar inflamación en las encías.
- Es un procedimiento útil para casos menos avanzados de enfermedades periodontales.
Aunque ambos procedimientos evitan el desarrollo de ciertas enfermedades periodontales, es fundamental identificarlos correctamente para no confundirlos.
En resumen, se puede decir que el raspado dental es una técnica de limpieza que se realiza en la superficie de los dientes. Por otro lado, el curetaje es un procedimiento más invasivo que permite eliminar la placa y el sarro acumulado debajo de la línea de las encías y en la raíz del diente.
No obstante, es fundamental acudir a un profesional de la salud bucal para obtener diagnósticos precisos y saber qué tipo de técnica es perfecta para casos particulares. No se recomienda, por ningún motivo, realizar alguno de estos procedimientos por cuenta propia.
Es importante recordar que, siempre es importante acudir a un especialista en periodoncia ante los primeros signos de enfermedad periodontal. Esto, con la intención de recibir el tratamiento adecuado y evitar complicaciones a largo plazo.