Los implantes dentales con tornillo se han convertido en una solución popular y efectiva para reemplazar dientes perdidos.
La pérdida de dientes es un problema común que puede afectar tanto la funcionalidad como la estética de la sonrisa, impactando negativamente en la calidad de vida de quienes lo padecen.
Afortunadamente, los avances en la odontología han proporcionado soluciones efectivas y duraderas, entre las cuales destacan los implantes dentales con tornillo. Continúa leyendo y conoce más sobre esta alternativa.
¿Qué es un implante dental con tornillo?
Un implante dental con tornillo es un dispositivo en forma de tornillo que se inserta en el hueso maxilar o mandibular para reemplazar la raíz de un diente perdido.
El implante está hecho de titanio, un material biocompatible que se integra con el hueso de forma natural. Una vez integrado, el implante proporciona una base sólida para colocar una corona o prótesis dental.
Partes de un implante dental con tornillo:
Los implantes dentales con tornillo se han convertido en una solución popular para reemplazar dientes perdidos. Es una alternativa de restauración duradera y estéticamente armónica. Un implante dental con tornillo está compuesto por tres partes principales:
Tornillo o Fijador:
El tornillo o fijador es la pieza fundamental del implante, similar a la raíz de un diente natural.
Es fabricado en titanio biocompatible y se inserta cuidadosamente en el hueso maxilar o mandibular, donde se integra con el tejido óseo a través de un proceso llamado osteointegración.
Esta unión fuerte y estable proporciona una base sólida y duradera para la corona o prótesis.
Pilar:
El pilar actúa como un puente entre el tornillo y la corona o prótesis. Una vez que el tornillo se ha integrado completamente con el hueso, se coloca el pilar sobre él. El pilar emerge a través de la encía, preparando el espacio para la etapa final de la restauración.
Corona o Prótesis:
La corona o prótesis es la parte visible del implante, la que reemplaza la parte externa del diente perdido.
Se fabrica de forma personalizada para que coincida con el color, la forma y el tamaño de tus dientes naturales. La corona se fija firmemente al pilar mediante un tornillo o un sistema de cementación, asegurando una restauración duradera y resistente.
Beneficios de los implantes dentales con tornillo:
Los implantes dentales con tornillo ofrecen numerosos beneficios, incluyendo:
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- Restauración de la función masticatoria y del habla: Al reemplazar la raíz del diente perdido, estos implantes actúan como dientes naturales, permitiendo masticar alimentos de manera eficiente y pronunciar palabras con claridad y confianza. Esto no solo mejora la calidad de vida en términos de alimentación, sino que también favorece la interacción social y la autoestima.
- Prevención de la pérdida de hueso alveolar: El hueso alveolar es el tejido que soporta los dientes naturales, y cuando un diente se pierde, este hueso comienza a reabsorberse gradualmente, lo que puede ocasionar problemas como la pérdida de soporte para los dientes adyacentes y la alteración de la estructura facial. Los implantes dentales con tornillo estimulan el hueso alveolar, previniendo su reabsorción y manteniendo la salud bucal a largo plazo.
- Aumento de la autoestima y la confianza: Una sonrisa completa y funcional juega un papel fundamental en la autoestima y la confianza en uno mismo. Los implantes dentales con tornillo, al restaurar la estética y la función de la sonrisa, permiten a las personas sonreír sin preocupaciones, hablar con seguridad y disfrutar de sus relaciones interpersonales sin inhibiciones. Este impacto positivo en la imagen personal se traduce en una mayor autoestima, seguridad y bienestar general.
Procedimiento
La colocación de un implante dental con tornillo es un procedimiento ambulatorio que se realiza bajo anestesia local.
El primer paso consiste en una evaluación por parte del especialista para determinar si es un candidato para un implante dental. Seguidamente, se hace una radiografía y se crea un plan de tratamiento personalizado, el cual consiste en realizar una incisión en la encía y colocar el implante en el hueso.
El implante necesita un periodo de 3 a 6 meses para integrarse completamente con el hueso. Durante este tiempo, el paciente llevará un provisional.
Una vez integrado el implante, se le toma una impresión y se fabrica la corona o prótesis definitiva. La corona se fija al implante mediante un tornillo.
La duración del procedimiento varía dependiendo de la complejidad del caso, pero generalmente toma de 30 minutos a una hora.
Ventajas de los implantes dentales con tornillo
Los implantes dentales con tornillo presentan numerosas ventajas en comparación con otras opciones de restauración dental, como las prótesis removibles o los puentes.
Una de las principales ventajas es la mejora significativa en la masticación y el habla, permitiendo al paciente comer y comunicarse con mayor facilidad y confianza. Además, estos implantes previenen la pérdida de hueso alveolar, un problema común que puede ocurrir con otras soluciones dentales.
Son una solución a largo plazo, con una tasa de éxito superior al 95%, lo que los convierte en una opción duradera y confiable.
A diferencia de las prótesis dentales removibles, los implantes con tornillo no se deslizan ni se mueven, proporcionando una sensación de estabilidad y seguridad.
También ofrecen un aspecto natural y atractivo, mejorando notablemente la apariencia facial del paciente. En conjunto, estas ventajas contribuyen a una mayor confianza y seguridad en el día a día del paciente, mejorando su calidad de vida.
En conclusión, los implantes dentales con tornillo representan una solución avanzada y eficaz para la sustitución de dientes perdidos. Su capacidad para integrarse de manera natural con el hueso maxilar o mandibular, proporcionando una base sólida para coronas y prótesis, los hace una opción ideal para quienes buscan restaurar tanto la funcionalidad como la estética de su sonrisa.